Su gusto por el diseño de interiores comenzó con una visión local. Ahora, después de varios años de experiencia, su estudio reluce con un enfoque mucho más internacional al buscar alrededor del mundo nuevos materiales, ver técnicas innovadoras, visitar y trabajar con proveedores de otras latitudes y asistir a ferias por lo largo del mundo, con el objetivo de mantenerse siempre actualizada y así llevar a Latinoamérica lo mejor
Dulce Pérez Colmenárez. Fotos por Luis Gómez @gomezsufilms
El nombre de Johana Agudo destaca entre las cinco personalidades que están cambiando el diseño panameño; por ello, para AUNO es todo un honor entrevistar a una mente brillante que, por más de 20 años, ha sido uno de los pilares de la transformación estética en el mundo del interiorismo de nuestro país. “Estoy muy agradecida por esta distinción. Un logro que se obtiene a través de un largo trabajo y un gran equipo de profesionales, pero, sobre todo, a la confianza de nuestros clientes que se han mantenido fieles a la marca durante este tiempo”.
Mérito que Johana ha labrado gracias a su constante disciplina, responsabilidad, ética y, especialmente, al demostrar amor y pasión por lo que hace. “Lo bueno de nuestra profesión es que, entre más tiempo se está en el mercado, más in estamos; y es que nuestro know how ha ido evolucionando a lo largo de los años que tenemos en la industria. Hoy en día, nos encanta innovar en los proyectos e incluir siempre ese factor wao!
“En cada proyecto, los detalles son considerados para crear una armonía de elementos, que tenga como resultado una obra de lujo, confortable y muy hermosa”
Gracias a este reconocimiento, no podíamos dejar de preguntarle a Johana cómo es su proceso creativo actual. “En primer lugar, hacemos un análisis previo con el cliente para conocer el valor que siente por el proyecto y a dónde lo quiere llevar. Así que empezamos con definir un estilo. Puede que haya muchas ideas buenas, pero cuando el norte está claro, todo fluye”.
En segundo lugar, mas no menos importante, un presupuesto estimado para hacer diseños posibles, “porque sea cuál sea el sueño, siempre hay que poner los pies en la tierra y estar conscientes de cuál es el alcance al que se puede llegar. Esto nos ayuda a saber cómo enfocar los recursos”. El último paso se orienta en determinar la ejecución de las dos etapas anteriores. “Punto vital, ya que, como siempre lo digo, el papel aguanta todo, pero hacerlo y llevarlo a cabo es realmente el trabajo”.
Otro detalle importante en este proceso creativo es pensar en la inclusión de cinco elementos, que se han vuelto un sello de Johana Agudo Studio Design:
1. Función. Razón por lo cual fue creado el espacio.
2. Personalidad. Cada proyecto tiene su propio ADN, y eso siempre hay que encontrarlo.
3. Iluminación. Toda obra debe tener una iluminación artificial y natural adecuada. A Johana le gusta jugar con los efectos que generan la luz y la sombra, a fin de obtener espacios más dramáticos.
4. Arte. Cada día se enfoca más en la manera en que las piezas artísticas agregan valor tanto a un espacio interior como exterior.
5. Naturaleza, la cual siempre hace que el proyecto se sienta vivo, por lo cual no olvida las plantas y flores, ya que agregan calidez e intimidad.
Además de estos imperdibles, Johana siempre está atenta a las tendencias y nuevas tecnologías, para brindarles siempre lo más sofisticado a sus clientes. “Los tiempos cambian y, cada día, a una velocidad más rápida; por ello, es todo un reto poder trabajar con innovadores materiales e ideas, a fin de seguir moldeando la cultura del diseño panameño”.Con este ímpetu por la innovación, se ha percatado que los espacios residenciales conviven más con los avances tecnológicos para hacerlos realmente placenteros. “Buscamos áreas acogedoras y que brinden multifunción, sobre todo, al cambiar el estilo de trabajo después de la pandemia”.
Otros de los desafíos que ha enfrentado Johana es dirigir una obra con más de 3.500 m2 en espacio interior. “Administrar un proyecto de este tamaño a control remoto, debido a que se encuentra fuera de Panamá, involucró un replanteamiento de nuestra manera de trabajar y coordinar con los profesionales tanto locales como llevados a la obra”.
“Es increíble cómo la iluminación puede cambiar la manera en la que percibimos los espacios”
Como era una sola residencia, había que llevar un hilo conductor entre sus varios espacios. “Se involucró una gran cantidad de productos, fábricas, diseños mandados a confeccionar a la medida en todas partes del mundo y asegurarnos de la calidad de los mismos. Hablamos de librerías en bronce y cuero, alfombras de formatos enormes, lámparas especiales y ni hablar del megatrabajo artesanal de alto nivel en ebanistería, además de sistemas especiales de automatización, iluminación, entre otros”.
Ahora, Johana continúa su labor con dos proyectos internacionales sin dejar de trabajar con las promotoras panameñas “Actualmente, estamos desarrollando dos conceptos muy especiales a punto se ser lanzados. Síguenos en nuestras redes sociales para que no te pierdas de los pormenores”.
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