La coctelería, antes entendida como una “simple” unión de bebidas espirituosas, ha evolucionado hacia un arte culinario donde la creatividad y la experimentación son los protagonistas. Justamente, este año, deslumbra una oportunidad de transformaciones radicales en el mundo de los cócteles, con tendencias que van desde la búsqueda de la pureza hasta la sostenibilidad y la reinterpretación de los clásicos
Por Olga Reyna. Fotos por Diego Echevers @dethography| Locación: American Trade Hotel| Fotos del trago: Coco Whisky Sour
Claridad y profundidad: los cocteles clarificados
La clarificación, una técnica ancestral utilizada en la cocina, ha encontrado un nuevo hogar en la coctelería. Los mixólogos están utilizando ingredientes como clara de huevo, caseína de leche o bentonita para eliminar las impurezas y obtener bebidas cristalinas de colores vibrantes y sabores concentrados. Esta tendencia no solo busca la perfección estética, sino también la máxima expresión de los ingredientes; además, permite crear cócteles con perfiles de sabor más definidos y equilibrados, donde cada elemento juega un papel fundamental.
La fermentación: un toque ácido y complejo
Un proceso milenario de conservación de alimentos aporta a los cócteles una complejidad y profundidad de sabor inigualables. Los bartenders están experimentando con la fermentación de frutas, verduras, hierbas y especias para crear sabores únicos y sorprendentes. Los kimchi, los kombucha y los pepinillos fermentados son algunos de los ingredientes que están revolucionando la coctelería. Además de la complejidad de sabor, esta técnica aporta una acidez natural que equilibra la dulzura de los cócteles y añade una dimensión extra a la experiencia.
Clásicos reinventados: un homenaje con un toque moderno
Los cócteles clásicos son un legado que debemos preservar, pero también reinterpretar para adaptarlos a los gustos actuales; por ello, ahora los mixólogos toman las creaciones más emblemáticas para darles un giro contemporáneo, utilizando ingredientes locales y de temporada, técnicas innovadoras y presentaciones sorprendentes. Por ejemplo, un Old Fashioned puede elaborarse con un whisky ahumado y un toque de naranja sanguina, o un Martini puede prepararse con ginebra infusionada con hierbas locales. Esta tendencia no solo rinde homenaje a la historia de la coctelería, sino que también demuestra la versatilidad de las preparaciones que nunca pasan de moda.
Coctelería sostenible: un brindis por el planeta
La industria de la coctelería está comprometida con la sostenibilidad, pues utiliza ingredientes de origen local y de temporada, reduce el desperdicio alimentario y opta por envases ecológicos. Adicionalmente, está explorando nuevas formas de reducir la huella de carbono de sus bebidas, como la creación de cócteles sin alcohol o con bajo contenido alcohólico. Esta onda sustentable no solo es una tendencia, sino una necesidad para garantizar un futuro más llevadero para nuestro planeta.
Otras tendencias a tener en cuenta
· Cócteles minimalistas: preparaciones con pocos ingredientes, pero con sabores intensos y bien definidos.
· Bebidas saladas: el umami, el quinto sabor, está ganando protagonismo en la coctelería. Ingredientes como la salsa de soja, el miso y las algas marinas aportan una complejidad y profundidad de gustos únicos.
· Técnicas de alta tecnología: herramientas como sifones moleculares, centrifugadoras y baños de nitrógeno líquido permiten crear texturas y presentaciones sorprendentes.
· Experiencias inmersivas: ahora se crean vivencias únicas alrededor de los cócteles con presentaciones teatrales, maridajes con comida y música en vivo.
¡Estamos viviendo un momento de gran creatividad e innovación! Al combinar técnicas ancestrales con ingredientes modernos y un enfoque sostenible, la coctelería se convierte en un arte que evoluciona constantemente y se adapta a los gustos de cada época.
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