Tras años de éxitos, la experiencia gastronómica de Casa Stizzoli se renueva para que esta gastroteca siga llevando al comensal por un fabuloso viaje a Italia, de norte a sur, a través de memorables sabores
Dulce Pérez Colmenárez. Fotos por Gonzalo Picón @gonzalopicon
Inspirado en las recetas de su madre y en sus vivencias infantiles en la bella Italia, Roberto Stizzoli decidió convertirse en maestro pizzaiolo, para cautivar a los paladares con lo mejor de la italianidad.
Deseo que ha explayado fabulosamente por medio de varios conceptos que se han posicionado muy bien en nuestra ciudad como lo ha hecho Casa Stizzoli, restaurante que cumple un lustro creando deliciosos sabores, vivaces toques musicales y espectaculares cócteles de autor difíciles de olvidar. Por ello, en definitiva, su nombre se ha convertido en la excusa perfecta para vivir a cabalidad el slogan: buon cibo, buon vino, buoni amici (buena comida, buen vino, buenos amigos).
Y para celebrar estos cinco años de su cocina purista, su chef y maestro pizzaiolo Roberto Stizzoli desea honrar las tradiciones y los ingredientes de Italia por medio de reinterpretaciones de platos que, sin duda, enaltecerán aún más la italianidad con creaciones únicas.
Ideal que apoya fielmente cada uno de los integrantes del Grupo Stizzoli, quienes ahora asumen la responsabilidad de seguir marcando tendencia en la ciudad, por lo que han decidido evolucionar la marca y moverla al ritmo de un mundo que quiere proponer experiencias que, si bien son nuevas e innovadoras, respetan el pasado y se presentan de manera disruptiva.
“Ahora, la idea no es solo disfrutar de tu plato italiano favorito, sino deleitarse de la experiencia como comensal. Abrir tu mente para que tus sabores preferidos estén representados de manera diferente, para que te lleven a un viaje único y sorprendente”, destaca Humberto Pappaterra, CDO (Chief Development Officer) del Grupo Stizzoli.
En cuanto a la coctelería, es algo que la marca se toma muy en serio. “Creemos que es otra forma de vivencia gastronómica; por lo que, en este nuevo quinquenio, tendremos propuestas conceptuales que resaltan nuestro punto de vista, con técnicas, italianidad y mucha disrupción”.
Además de estas innovaciones, Casa Stizzoli también se prepara para un cambio en su diseño, a fin de adaptarlo a las nuevas tendencias. “Creemos que hay cosas que son timeless y así consideramos la arquitectura de nuestro restaurante, lo que nos da la versatilidad de transformarla y complementarla en función de las experiencias puntuales que tenemos en nuestro cronograma”.
Para incentivar todos los sentidos, la marca ya está organizando nuevas experiencias, pues entiende que las personalidades evolucionan y “queremos proponer y vivirlas con nuestro público”.
Así que ya se encuentran organizando una amena agenda con actividades que se enfocan en la gastronomía, lifestyle, coctelería y nightlife, las cuales “se extenderán todo un año o hasta que nuestra personalidad evolucione a otros estilos”.
“Somos creyentes de que la clave para ganar la fidelidad de nuestros amigos y clientes es siempre mantener la calidad, buen servicio, excelente ambiente y proponer con profesionalismo, creatividad, y bases sólidas. A partir de ahora no nos verás igual, porque tú tampoco lo serás”
En cuanto al valor de ser socialmente responsable, Casa Stizzoli siempre ha tenido, como parte de su filosofía, ser una marca humanitaria, por lo que no dejará de diseñar actividades con propósito social, cultural, gastronómico y empresarial, “con ánimos de contribuir con la ciudad y el país en todos los puntos de vista que estén a nuestro alcance”.
Y con esta excelente visión de una marca que se fortalece pensando también en el crecimiento de su comunidad, la celebramos por todo lo alto exclamando con alegría: Buon cibo, buon vino y buoni amici.
Conoce más de esta sabrosa propuesta en:
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